miércoles, 29 de abril de 2015

Rapsodia del triste

Nos esforzamos
tan a menudo
como podemos
por parezer
menos frágiles
menos arrebatados
de grazia.

Y
nos encontramos
con un pie
en tierra firme
y el otro
removiendo
arenas
movedizas.


Las mismas arenas movedizas de siempre
Los mismos brillantes y granulados
pedazos de tierra. Arena en baño dorado
y olor a limones de destiempo'.
Nunca predominaron los árboles frutales.
Andaluzía es tierra de desierto
de calor
de garganta
de vórtize.

En preámbulo
a la llegada
de  nuevas lluvias,
suspiro sin fondo.

No faltan colores
en las calles
ni cuerpos
que se muevan
a destajo.
Pero
yo
como
si
nada

(Como siempre)

me quedo
con la mirada clavada
en un horizonte
que no me corresponde
esperando oir
el chaputeo
azelerado
de un corazón
amante de las lluvias.

Oir eco sordo de tu voz
Embalarme entre tus dientes.
Comerme el fríorestante.